HOMENAJE AL LIBERTINAJE

Este es un homenaje al uno de esos grupos efímeros que existieron durante un par de años.
Eso le ha pasado a muchos, pero ninguno ha destilado tanto carisma, talento, romanticismo, punk y libertinaje como The Libertines.
Una leyenda.
En su biografía, en la que abundan la heroína, la cocaína, el crack, el alcohol y la poesía a partes iguales no voy a entrar yo aquí.
Eso si, las memorias de Pete Doherty que se publican el año que viene las espero con los brazos abiertos.
Voy a presentaros sus discos.
Si no los conoceis, fiaros del Libertino y poned la mula a trabajar.
TRATADO PUNK Nº1


Up the bracket, 2002
Mi llegada a la gran ciudad, una residencia en la que convivía con once mujeres de múltiples nacionalidades, vivir al lado de un McDonalds... el sueño hecho realidad.
Compro el NME religiosamente cada semana.
Mmmm, vamos a comprar el disco de esta peña, distribuye Sinnamon y sus precios molan.
Joder, que discazo. Que ritmo, que garra, que energía, que caos tan maravilloso, que anarquía, que melodía, que sudor, que brincos, que reflejos a los Clash, a los Jam, al sonido Motown, con esas bases rítmicas...
No ponía un 10 sin peros a un disco desde el debut de los Strokes (Ok computer de Radiohead o Pinkerton de Weezer son también de 10)
Un clásico OBLIGATORIO E IMPRESCINDIBLE. En Fnac cuesta cinco eurillos con noventa y cinco.
Lo tengo firmado por los cuatro y Pete Doherty lleva mi firma en tamaño XXL en sus pantalones tejanos.

TRATADO PUNK Nº2


The Libertines, 2004
Con el espectacular single Don´t look back into the sun de por medio y una más que posible disolución de la banda a la vista, Mick Jones (ex The Clash y productor de los dos discos de los Libertines) consigue retener a Doherty en el estudio el tiempo suficiente para grabar un nuevo trabajo.
El resultado es un disco semi amateur, con una producción cruda, más incluso que la de su debut.
No importa. Las canciones están ahí y Carl Barat y Pete Doherty se declaran su amor-odio tema tras tema, de principio a fin.
Una gozada melancólica que nos ponía sobre aviso de la catástrofe que se avecinaba.
Otra compra obligatoria, disponible en edición especial con un dvd en el que aparecen por la plaza Colón de Madrid haciendo el gañán o mi perfil (y mi parka, básicamente mi parka) en la grabación del concierto en la sala Moby Dick.
Les echo de menos.