LA PELI DEL SÁBADO

A falta de una semana para el estreno de Quantum of Solace recupero el hasta ahora último Bond para flipar.

No la había visto desde que la alquilé y la vi de aquella manera en una tele de piso compartido y anoche... joder, es la mejor peli de todas.

Recordaba la parte de las cartas como soporífera, pero no lo es tanto (y además uno de los jugadores fue profesor, por decir algo, mío) porque se alterna con unas hostias como catedrales y el ritmo no decae realmente en ningún momento.

Y luego el principio, que mola más que la última de X-Men y los golpes de humor seco (como las hostias) que ya la encarrilan por otros derroteros que van a molar más que nunca, vaya que sí.

Y la muerte de la espía que le amó es lo más hermoso y aterrador que he visto en lustros.

Ahora sí que me muero de ganas de ver la secuela.